La inflamación es una respuesta natural del cuerpo a la lesión o la infección. En el contexto de la cirugía plástica, la inflamación puede ocurrir después de un procedimiento quirúrgico debido a la manipulación de tejidos y estructuras corporales. La inflamación puede causar hinchazón, dolor y enrojecimiento en el área tratada. La inflamación es una parte normal del proceso de curación después de la cirugía, pero puede ser incómoda para el paciente. Para minimizar la inflamación después de la cirugía, se pueden recomendar tratamientos como la aplicación de hielo o la administración de medicamentos antiinflamatorios recetados por el cirujano plástico. Es importante que los pacientes sigan las recomendaciones de cuidado postoperatorio para minimizar la inflamación y ayudar en la recuperación después de la cirugía. La inflamación debe disminuir gradualmente durante el período de recuperación y es importante informar al cirujano plástico si la inflamación no mejora o empeora con el tiempo.